Conocí a sus padres hace tres o cuatro años cuando les hice las fotografías de su Boda, estaban espléndidos ese día, sin embargo, cuando me llamaron hace poco tiempo para decirme que habían sido padres y que querían que les hiciese las fotografías de su primer hijo Nicolás, no os podéis ni imaginar la ilusión que me hizo, pues además de tener un buen recuerdo de su maravillosa boda iba a conocer a esta pequeña criatura de dos semanas de vida.
Cuando llegué a su casa, se respiraba a bebé, a amor, a ilusión, a delicadeza, a ternura, a todas esas cosas que envuelven a un nuevo ser cuando llega la hora de nacer. Sus padres estaban con un brillo en los ojos espectacular, pues tenían en sus manos su pequeña criatura.
Durante la sesión, como es obvio tuvimos de todo, desde las carcajadas de sus padres por las caras que ponía el pequeño hasta los ojos humedecidos de una madre inmensa de amor. El pequeño Nico se portó fenomenal, estuvo despierto, expectante, observador, hasta que conseguimos dormirlo.
Muchas gracias chicos por pensar de nuevo en mí, para retratar estos momentos de Felicidad en estado puro, y a tí, pequeño Nico, nos volveremos a ver pronto, eso seguro. Solo me queda deciros ¡hasta pronto familia!